Una de nuestras voluntarias recibió un llamado a las 3 de la mañana para que fuera a retirar un caballo de forma urgente. De lo contrario lo devolverían a los carreros que habían sido encontrados robando cables. Ella no pudo acudir a la comisaria Quinta de Wilde con esa inmediatez. Horas mas tarde, en camino a su asistencia tomamos conocimiento que el caballo habría sido devuelto a los delincuentes y sin intervención de la fiscalía de turno. Además, el animal era presumible de haber sido robado.  No es la primera vez que sufrimos estos atropellos: dos meses atrás a una de nuestras voluntarias se la sometió a un interrogatorio de cinco horas. Era testigo del delito de maltrato o estaba brindando una declaración indagatoria?


Queremos salvar caballos, pero existen múltiples actores del sistema que atentan contra ello. Dado que las ongs no recibimos subsidios y hacemos los rescates con mucho esfuerzo, debemos también absorber ineficiencia de las  instituciones ? Nos preguntamos: ¿que hace el municipio para acabar con este flagelo? Esperamos que el Intendente Alejo Chornobroff se ponga a la cabeza de este asunto que además de maltrato animal conlleva explotación infantil, cuatrerismo, robos, hurtos y faena clandestina.

Revolver basura en un carro no es bueno para nadie. ¿Por qué no incorporar a las personas a un sistema de reciclaje urbano sin caballos?
No podemos seguir esperando. Exigimos NoMasTAS: Reconversión de la actividad carrera y prohibición absoluta de la tracción a sangre animal.